
El nombre que debía ser borrado del desarrollo energético
11 noviembre, 2024
El Gasoducto Presidente Néstor Kirchner fue una obra necesaria para la soberanía energética de nuestro país y un símbolo del desarrollo del sector y eso es lo que molestaba en el seno del Gobierno que encabeza Javier Milei.
A través de la Resolución 326/24 de la Secretaría de Energía del Ministerio de Economía de la Nación, oficializaron el cambio de nombre del “Gasoducto Presidente Néstor Kirchner” al “Gasoducto Perito Francisco Pascasio Moreno”.
Esta obra había sido anunciada por Alberto Fernández en 2019 y fue inaugurada el 9 de julio del año pasado, en un acto que tuvo en el escenario al entonces presidente, junto a Cristina Fernández de Kirchner, Sergio Massa y Axel Kicillof.
El gasoducto se convirtió en un símbolo de la transformación energética y productiva del país, que la actual gestión de Javier Milei continuó y hoy en día transporta unos 24 millones de metros cúbicos por día.
Este proyecto además muestra un modelo en donde el Estado actúa de forma activa para generar un ahorro de unos 4.000 millones de dólares por año, y a la vez, la creación de puestos de trabajo para unas 48.000 personas a través de la obra pública.
Este ejemplo genera muchas tensiones en el Gobierno, que por un lado celebra el ahorro fiscal que genera el gasoducto y además beneficia a muchas empresas que tienen presencia en Vaca Muerta, pero por el otro lado, muestra un modelo exitoso de gestión que está ligado a la visión peronista del Estado.
En la resolución, el Gobierno considera que las “obras de infraestructura, los monumentos y edificios históricos constituyen valores públicos de carácter plural, en consecuencia, al nombrarlos en forma unilateral y sistemática para exaltar figuras partidarias, se desvirtúan los valores básicos que cimentan nuestra Constitución y la República”.
La misma situación se había dado con el Centro Cultural Kirchner, que cambió de nombre el mes pasado y pasó a denominarse “Centro Cultural Palacio Libertad Domingo Faustino Sarmiento”. Lo simbólico es parte importante de la gestión actual y se pretenden borrar todos los nombres que puedan mostrar un modelo exitoso de gestión estatal.