Tierra del Fuego toma el control: YPF se retira y la provincia apuesta por una petrolera propia
11 noviembre, 2025
Mientras YPF concentra sus esfuerzos en Vaca Muerta, Tierra del Fuego decidió hacer lo que muchos gobiernos provinciales sueñan pero pocos concretan: quedarse con sus propios yacimientos y gestionarlos desde el Estado. Así, el fin del mundo se convierte en punto de partida para una nueva etapa de soberanía energética.
El gobernador Gustavo Melella encabezó la firma del acuerdo definitivo con el presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, y el titular de la flamante empresa provincial, Maximiliano D’Alessio. Desde 2026, Terra Ignis Energía será la responsable de operar siete áreas hidrocarburíferas —entre ellas Los Chorrillos y Lago Fuego—, garantizando la continuidad laboral y productiva.
“Este acuerdo es un paso fundamental para la soberanía energética y el desarrollo provincial”, sostuvo Melella, que no ocultó la carga simbólica del momento: “YPF hizo el país a lo largo y ancho, también Tierra del Fuego. Pero hoy nos toca tomar la posta”.
En la práctica, el convenio implica la cesión de las áreas por parte de la petrolera nacional, la reubicación del personal afectado y la extensión del plazo de concesión bajo administración provincial. Un movimiento que transforma a la provincia en dueña y responsable directa de su destino energético.
“Lo que significaba Vaca Muerta para la Argentina en el pasado, es lo que puede representar Tierra del Fuego en el futuro”, arriesgó el mandatario, agradeciendo la predisposición de YPF para negociar sin conflictos y evitar el vaciamiento de las áreas.
Desde el Gobierno fueguino remarcan que Terra Ignis no es una aventura improvisada, sino una apuesta estratégica a largo plazo. “No se puede vivir llorando por el pasado, hay que apostar a lo nuevo”, dijo Melella, dejando claro que el desafío ahora es propio: “Ya no vamos a poder echarle la culpa a otro. Si algo sale mal, será responsabilidad nuestra”.
La ministra de Obras y Servicios Públicos, Gabriela Castillo, también celebró la decisión: “Terra Ignis posiciona al Gobierno de la provincia de otra manera en la explotación hidrocarburífera”. Y fue más allá: “No queremos solo sostener el área, queremos hacerla crecer, mejorar pozos, explorar nuevas zonas y generar valor agregado con mano de obra local”.
El acuerdo, que deberá ser refrendado por la Legislatura provincial, fue presentado como un ejemplo de autonomía productiva en tiempos de ajuste nacional. Mientras la Casa Rosada promueve privatizaciones y recortes, Tierra del Fuego avanza en la dirección contraria: más Estado, más control y más valor local.
En palabras del propio Melella: “Viene una etapa nueva, importante. Ya no vamos a depender de decisiones que se tomen a mil kilómetros de acá. Este paso es soberanía, trabajo y futuro”.
Con la creación y fortalecimiento de Terra Ignis Energía, la provincia más austral del país apuesta a convertirse en un actor energético de peso propio, con gestión local, inversión pública y alianzas estratégicas. Un modelo que recuerda a los inicios de YPF, pero con bandera fueguina.
